El montañismo o alpinismo, nace en los alpes al final del siglo XVIII como una disciplina que consiste en realizar ascensiones a las montañas. Es también el conjunto de técnicas, conocimientos y habilidades orientadas a la realización de este objetivo. El montañismo no es un simple deporte, pues deriva de una antigua actividad exploratoria del ser humano y como tal cuenta con una historia y tradiciones muy importantes que determinan una ética bien definida (by fair means) que es el parte aguas entre esta disciplina y otras formas de turismo de aventura. Además, quienes lo practican lo consideran como un verdadero estilo de vida y una forma de experimentar e interpretar el mundo que los rodea.
El montañismo se podría dividir en cuatro áreas que engloban diversas especialidades, algunas de las cuales se alejan de la definición estricta de ascender montañas, pero que no obstante, requieren de este medio natural para su práctica: senderismo (o hiking), excursionismo (o trekking) y expediciones; escalada deportiva (y boulder) y escalada en hielo; duatlón en montaña, media maratón de montaña y maratón de montaña; barranquismo, esquí de travesía y bicicleta de montaña.
El término montañismo muchas veces se entiende como el deporte practicado en las altas montañas, es decir, el montañismo de altura. Así quien asciende a las montañas se le llama montañista o montañero y no a quién solo practica una de las especialidades mencionadas. También cuando se habla de un curso o manual de montañismo, éste se enfoca al excursionismo por las montañas y no a toda la gama de especialidades que se mencionan.